miércoles, 31 de enero de 2007

Eris

Del griego: disputa, emulación.

Sólo en el enfrentamiento dialéctico llega uno a comprender la grandeza del otro. O eso se deduce de la etimología (que, por otro lado, es dudosa, como todas las etimologías).

lunes, 29 de enero de 2007

EuRopa

Del griego eu, bueno o feliz, y del gótico raupa, que según el Diccionario de la Real Academia significa botín.

Y es verdad que los europeos tenemos un gusto distinguido al vestir.

sábado, 27 de enero de 2007

Europa, Europa

El ex-presidente Aznar dijo ayer en no sé qué universidad brasileña, a la que fue a recoger un honoris causa, que Europa ha olvidado sus raíces cristianas y que está enfangada en el relativismo moral.
También dice que los inmigrantes deberían empaparse de raíces judeocristianas para que todos nos sintamos a gusto.
Por lo visto, se quedó atascado tiempo atrás. Se le han olvidado la separación entre el Estado y la Iglesia y la racionalidad crítica que diluye todo dogmatismo moral. Se le ha olvidado el liberalismo político, con su pluralidad de formas de vida y de creencias. Se le ha olvidado la lucha por los derechos emprendida por grupos tradicionalmente ignorados, como obreros, mujeres, extranjeros y, oh, gays.
Si te combaten como europeo, defiéndete como europeo.

viernes, 26 de enero de 2007

Cunfusión en la ciudad alta

Ayer fui a ver Babel. Un americano pidió las entradas a mi lado y dijo: Beibel. Descendamos y confundamos allí su lengua, para que ninguno entienda el habla de su compañero (Gen. 11:7).
Es una película para compartir el sufrimiento. Pues, al fin y al cabo, seguimos estando en la misma ciudad. Eso sí: ¿sólo el dolor nos une? Un nombre: Adriana Barraza. Una escena: Richard - Brad Pitt - ayuda a Susan - Cate Blanchett, mi actriz favorita - a hacer pis. Aunque la amiga con la que fui al cine pensó que esta era la típica escena hecha a la medida de almas sensibles (es decir, sensibleras). Ejem. Puede ser.
Ella hubiera preferido que nos mostraran cómo Brad ayudaba a limpiar y a cambiarse de ropa a Cate. Volvamos a edificar. Una mente práctica, sin duda, y esa imagen también me enternece.
A lo mejor se me ocurre algo más que decir, pero ya se sabe que el dolor es mudo o balbucea.

miércoles, 24 de enero de 2007

Propietarios

Dijo Burke, cuando le entró el picor contra la Revolución Francesa (hablamos de allá por 1790 y la revolución recién había comenzado), que "la esencia característica de la propiedad, constituida a partir de los principios conjuntos de su adquisición y conservación, es ser desigual". O sea que si algunos son propietarios de algo, otros no lo son - de ese algo - y tienen que servir. Razón por la cual se considera justificado que tengan menos derechos políticos.

Dijo Bentham, más o menos en la misma línea, que "si todos los hombres tienen todo tipo de derechos de propiedad con relación a todo tipo de propiedad, sin excepción; en una palabra, que todos los hombres tienen derecho a todo", entonces "lo que es derecho de todos no es derecho de nadie". O sea que si se establece algo así como una sociedad igualitaria en cuestiones de propiedad, se acaba la propiedad y ésta pertenece al Estado. Lo cual, para Bentham y otros liberales, acaba en anarquía social y en dominio estatal. Libertad, pero no libertinaje. Porque la libertad es la de los propietarios.
Cuando nuestro Rajoy escribió lo que escribió en los 80 del pasado siglo, no hizo mucho más que articular esa posición clásica y convertirla en natural. Es decir, la típica postura de los liberales reconvertidos a la democracia: igualdad ante la ley, sí, pero cuidado, que hay derechos adquiridos y bendecidos por la historia (como cuando los nacionalistas se apropian del lenguaje y las constumbres, vamos).
Cuando Zapatero dice que cualquier español puede gobernar, cree oponerse a la versión americana de la idea (democrática). Lo dijo en una entrevista a Juan José Millás, también de El País, si no recuerdo mal. Triste rechazo, pero eso ya lo sabíamos.
Pero ahora ni Rajoy ni El País - ni Zapatero - deberían preocuparse más por ese tema manido de la propiedad, porque ya se sabe que todos servimos al capital financiero y a los bancos. Pero eso no significa que cualquiera - cualquier hijo de vecino - pueda gobernar. Esto sigue siendo cierto. Incluso Rajoy podría hacerlo, y seguiríamos siendo asalariados con derecho a voto.

sábado, 20 de enero de 2007

Somos amigos

La teoría política del amigo / enemigo de Carl Schmitt es perfectamente aplicable a la política española en este momento, que según muchos es crucial.

Somos amigos todos los que creemos en el progreso de la cultura y la democracia, en los derechos inalienables de las minorías culturales, de las lenguas polifónicas, de la justicia social, en la paz, la conversación, la buena onda, los abrazos, la traducción simultánea. Los amigos combatimos, a su vez, a los que, de forma autodeductiva y por lo tanto autodiscriminatoria (si son así es porque quieren), son unos cabrones. Las banderas son lo de menos. Lo que marca la línea entre los dos frentes es algo así como que unos puedan sostener una bandera policromada y multidialógica, mientras los otros se aferran a los colores antiguos y sostienen, además, la desigualdad entre los hombres (ver artículo de El País de ayer).

viernes, 19 de enero de 2007

La bravitude

Creo que fue a principios de este mes de enero cuando Ségolène Royal, candidata socialista a la presidencia de Francia, soltó la palabra bravitude en vez de la correcta bravoure. No sé francés pero se entiende, ¿no? Las burlas han dado la vuelta al mundo o, por lo menos, a Europa, con lo que quiero decir que hasta España han llegado. Se parece a aquella ocasión en que el candidato republicano a la vicepresidencia con George Bush, padre, Dan Quayle, no supo escribir la (por otra parte, fácil) palabra potato, escribiendo potatoe en su lugar. (El inglés es bastante difícil de escribir para los pobres ingleses).

La cuestión es que las burlas a Ségolène no han sido menores por ser socialista y mujer, dos atributos que aparentemente están bien vistos en Europa entre los bienpensantes, si bien todo fue más sangrante con Mr. Quayle, y con razón, porque el sujeto era bastante tonto y, además, ya había tenido la oportunidad de manejarse en la vicepresidencia. De todo esto deduzco que no ha habido un especial trato de favor - informativo - a Ségolène en España.

El día 14 de enero, Lucía Etxenike aprovechó la anécdota para escribir un artículo en El País titulado "Pacitud", sobre el estado de la paz y el diálogo D.A. (después del atentado). No está mal.

Ségolène se ha hecho popular en España por sus propuestas de democracia participativa. Y por ser mujer y socialista y porque la han criticado por todo eso y porque está encamada, como decía mi abuela, con el líder de los socialistas, que es un señor gordito y más feo que ella. Habría que preguntarse si el uso de la bravitude demuestra alguna seria incapacidad para la política, del mismo modo que criticamos a Zapatero por sus frases no infantiles, sino rozando el sobresaliente en la universidad. ¿Una utilización absurda del lenguaje impide el buen gobierno? ¿O es la bravitude de Ségolène sólo un hachazo hasta cierto punto valiente, la metedura de pata del político que se atreve a hablar?

jueves, 11 de enero de 2007

MUDANZA


Las mudanzas tienen un aire extraño. Debe de ser por lo de meterlo todo en cajas. Es mejor no llevarse nada, hacer eso que llaman "empezar de cero". Aunque yo siempre me llevo las cajas y cada vez tengo más cajas, y tampoco conozco a nadie que se haya ido o que haya llegado con lo puesto.

Todavía tengo una caja sin deshacer desde la última mudanza.

Pero aquí, en este blog, vamos a empezar de cero.